sábado, 29 de enero de 2011

Aires de fiesta

23 días sin fumar. Estoy observando todo el jaleo que se ha montado con Alex de la Iglesia y su dimisión por no estar de acuerdo con la ley Sinde. Yo, como la mayoría de los ciudadanos, no estoy cien por cien al tanto de lo ocurrido. Hay comentarios en todos los medios a favor y en contra del señor Alex de la Iglesia. Yo me posiciono claramente al lado del director y es por un tema que poco o nada tiene que ver con el tema de la discusión. Simple y llanamente me parece que más allá de ser un director, un guionista, el director o ex-director de una academia etc ha demostrado ser HUMANO y eso en los tiempos que corren es algo utópico.

Humano porque comete errores. Humano porque se contradice. Humano porque sufre.Y esto es así porque no se esconde. En el mundillo artístico y creánme que yo algo sé de ello, hay mucha doble cara. La gente se tiene que vender, ellos son el producto en sí y siempre muestran la cara buena y esconden toda la mierda debajo de la alfombra y en los cajones para que la gente no la vea. Y el señor Alex de la iglesia ha hecho todo lo contrario. Desde el primer momento se ha expuesto, ha intentado cambiar las cosas y eso al final se paga caro. Yo no sé si lo ha hecho bien o lo ha hecho mal, yo sólo sé que algo ha hecho y es mucho más de lo que se puede esperar de cualquiera.

Me quedo con una imagen suya en un periódico de difusión nacional en la cual se encuentra Alex en una cafetería con las gafas encima de la mesa y masajeándose la frente mientras mira su móvil, como diciendo:"A ver si pasa ya esto de una p.. vez!".La rebeldía en este mundo se paga como ya hizo otro gran rebelde como Juanma Bajo Ulloa pero yo, como Earl, creo en el karma y sus consecuencias y sigo confiando en la raza HUMANA. En estos tiempos tan revueltos, los gestos humanos son los que nos hacen seguir adelante.

0 comentarios:

Publicar un comentario